¿Cuáles son las bases de una política de compras de RSE? Parte 2

Comprar

En el capítulo anterior (pilar 1 "Proteger a las personas y el planeta": lea el artículo), quedó claro que la primera etapa de un enfoque de RSE Compras debía incluir la protección de la salud y la reducción del impacto medioambiental. Para lograrlo, el compromiso con la cadena de valor debe ser global, y sólo puede plantearse en colaboración con todas las partes interesadas en un abanico muy amplio de datos.

Como recordatorio, el enfoque deCompra Responsable se basa en 4 pilares:

  • Proteger a la humanidad y al planeta: la elección obvia
  • Colaboración con el proveedor: garantía de seguridad y garantía de futuro
  • Digitalización: una transformación esencial para una estrategia eficaz de Compra Responsable
  • Criterios sociales y societarios: el criterio último para la compra responsable

En este artículo analizaremos los pilares 2 y 3.

 

PILAR 2 - Trabajar con los proveedores

Colaboración con proveedores  Juego de interdependencia 

Para asumir esta responsabilidad sobre el producto, los departamentos de Compras ampliaron la relación con los proveedores de una negociación de precios a un contrato producto/calidad/normas, lo que dio lugar a una primera relación de interdependencia. Apoyarse en proveedores fiables y responsables de sus compromisos con el consumidor permite a los servicios de compras garantizar la tranquilidad de la marca en la distribución.

relación con los proveedores

Colaboramos más estrechamente, tanto en lo que respecta a la comprobación de la aplicación de nuestras normas (auditoría, muestreo, pruebas, etc.) como a nuestras estrategias para sacar al mercado productos innovadores.

Por ello, los compradores han introducido tablas de rendimiento de proveedores para todos los elementos de la relación, que también se utilizan para gestionar el riesgo de los proveedores con el fin de garantizar el suministro de sus pancartas.

Sin embargo, el comprador seguía teniendo que cumplir su objetivo principal: el rendimiento financiero. Por lo general, la aplicación de normas no hace más competitivos a los proveedores, que siguen estando en las mismas condiciones competitivas.

Paradójicamente, la legislación se ha implicado en la relación comercial entre compradores y proveedores: la normativa que regula el mecanismo de fijación de los Precios de Venta al Consumidor y, por tanto, las negociaciones, ha evolucionado a través de una sucesión de leyes (Reforma Sarkozy en 2004, Ley Dutreil en 2005, Ley Chatel en 2006) destinadas a restablecer el poder adquisitivo de los consumidores.

En 2008, con la crisis financiera mundial como telón de fondo, la Loi de Modernisation de l'Economie (ley francesa de modernización de la economía) permitió a los minoristas liberalizar sus políticas de precios, animando así a los compradores a exigir cada vez más a los proveedores para crear preferencia de marca a través del precio. Para mantener el rendimiento, los compradores han ampliado su zona geográfica de aprovisionamiento, mientras que los proveedores han utilizado palancas más financieras que fabriles, como las condiciones de pago, los grandes descuentos promocionales y, en el peor de los casos, las "ventajas" personalizadas.

 

Equilibrio en las relaciones con los proveedores  Una relación equilibrada con los proveedores

El equilibrio de poder se vio alterado en ocasiones, y el legislador volvió a intervenir, esta vez para desvincular las políticas comerciales de los distribuidores de las acciones negociadoras de los compradores. Se promulgaron dos leyes:

  • La ley Macron de 2015 tuvo como efecto proporcionar un marco más estricto para las relaciones comerciales al imponer un límite temporal a las negociaciones anuales, exigir el cumplimiento de los plazos de pago e introducir la noción de responsabilidad de los productos en el mercado. Estos elementos iniciales se reforzaron en la ley EGALIM sobre el equilibrio de las relaciones comerciales en el sector agrícola para una alimentación sana y sostenible con la noción principal de redistribución del margen aguas arriba.
  • Al mismo tiempo, uno de los objetivos de la Ley Sapin de 2016 era introducir medidas de transparencia y lucha contra la corrupción en la relación, basándose en el informe Volot de 2010, que ya había puesto de manifiesto las realidades ocultas de las relaciones entre empresas.

El compromiso actual en materia de RSE va mucho más allá de las relaciones con los proveedores basadas en la confianza y el respeto mutuo. Puede tratarse de una gestión compartida de los suministros y, por tanto, de la planificación de la producción, o de un compromiso plurianual de seguridad, inversión e innovación. En todos los casos, el cumplimiento de los plazos de pago y de los contratos es la piedra angular de una política de compras responsable, que siempre puede mejorarse avanzando hacia una mayor colaboración: precio mínimo garantizado, resolución adecuada de litigios, etc.

Colaboración con proveedores

Todas estas acciones demuestran la importancia del equilibrio en las relaciones comerciales y del respeto mutuo entre organizaciones, pero también la dificultad de inculcar esta responsabilidad macroeconómica frente a retos competitivos específicos.

 

PILAR 3 - Digitalización

Digitalización Al igual que ocurre con todas las demás funciones de la empresa, la desmaterialización y, por tanto, la reducción del papel es un elemento obvio de un planteamiento de RSE (¡aunque el uso intensivo de Internet tenga un impacto significativo en el clima!).

Del mismo modo, la digitalización permite a las organizaciones trabajar a distancia, lo que contribuye a reducir el impacto del transporte (y, de paso, a garantizar la continuidad de la actividad en medio de una crisis sanitaria).

Pero, y este es el punto fundamental, la digitalización permite a los distribuidores gestionar un enorme volumen de datos de forma correcta y segura. Recopilar, programar y utilizar Data sabiamente son las claves del éxito de una estrategia de compras de RSC. ¿Cómo comparar productos en una licitación sin todos los datos técnicos, etiquetas y costes asociados? ¿Cómo cumplir los plazos de pago a proveedores sin facilitar sistemáticamente la información o desmaterializar las facturas para reducir los plazos de tramitación interna? ¿Cómo posicionarse en términos de TCO sin poder integrar todos los indicadores?

Digitalización y data

Cuando hablamos de la digitalización de las compras, a menudo pensamos en la parte transaccional, con el uso de un ERP para garantizar el Procure to Pay. Pero la RSC también requiere una programación más avanzada, proporcionada por otras soluciones informáticas (MDM, Master Data Management, para gestionar los datos de referencia dentro de un único archivo maestro - PLM, Product Lifecycle Management, para el diseño, fabricación y mantenimiento de productos).

La legislación actual, en virtud de la Ley de Finanzas de 2020, está ayudando a impulsar esta digitalización, con la obligación de desmaterializar las facturas entre el 1 de enero de 2023 y el 1 de enero de 2025, dependiendo de su tamaño.

Por último, si el comprador responsable desea ir aún más lejos en la construcción de su CTP, y necesita tener en cuenta todos los costes de las externalidades medioambientales y sociales en su Coste Total del Ciclo de Vida de un producto, la organización debe proporcionarle herramientas de cálculo de costes y cuadros de mando eficaces. De este modo, toda la organización de compras puede volver a centrarse en tareas de optimización y selección de alto valor añadido, aseguramiento de suministros, agilidad en la toma de decisiones y RSC en particular.

 

>> Lea la última parte de nuestro dossier de presentación del Pilar 4 "Criterios sociales y societarios": leer el artículo

 

Por Catherine Fedrigo